domingo, 20 de febrero de 2011

¡Animales en peligro! - Lobo ibérico

El lobo (Canis lupus) es un miembro del orden de los mamíferos conocidos como Carnívoros. Probablemente las características más distintivas de los animales de este orden son sus largos y puntiagudos dientes caninos o colmillos y sus afilados premolares superiores y molares inferiores. Los carnívoros poseen un sistema digestivo simple y sus garras son normalmente afiladas. Además, sus clavículas son comparativamente pequeñas. Sus cerebros están altamente desarrollados, por lo que estos animales están considerados más inteligentes que la mayoría de los otros grupos.
Además del lobo, la familia de los cánidos también incluye el perro doméstico, el coyote, las distintas especies de chacales y el dingo.
La constitución del lobo indica inmediatamente su capacidad depredatoria. Las 42 piezas de sus fuertes mandíbulas, su amplia caja torácica y sus voluminosos músculos maseteros, que dan a sus ojos esa característica forma almendrada, son fruto de una pragmática evolución al servicio de sus funciones de depredador en la escala trófica.
Un lobo adulto puede tener una longitud de entre 100 y 120 centímetros, y una alzada a la cruz de entre 60 y 70 centímetros. El peso varía entre 30 y 50 kilos, aunque se han encontrado ejemplares de hasta 75 kg. Las hembras tienen unas dimensiones y peso inferiores a los de los machos.
Las variaciones de tamaño entre unas subespecies y otras pueden explicarse por las diferencias de temperatura de las zonas en las que habitan. Hay una relación inversa entre la temperatura ambiente y el tamaño corporal de un animal de sangre caliente. Aquellos animales de regiones más cálidas tendrán una masa corporal menor que aquellos otros que habitan regiones más frías (Bergman y Allen).

La edad del lobo en buenas condiciones de supervivencia puede alcanzar los 16 años.
En todo el mundo existen 32 subespecies del lobo, que se pueden englobar en cuatro grupos: lobos blancos (tundrarum en Alaska, albus en la región ártica europea), lobos rojos (pallipes en las zonas predesérticas de Eurasia), lobos grises (pambasileus en Alaska) y lobos pardos (signatus en la Península Ibérica, lupus en Eurasia). También existen otras especies dentro del género Canis lupus, que acogen a subespecies menores, en Norteamérica y la India.
El lobo es un superdepredador que ocupa, en su hábitat natural y sin competencia del hombre, la parte superior de la pirámide nutricional. Esto significa que se trata de un depredador que carece de competencia externa para la regulación de su población, y que su crecimiento está sólo limitado por:
  • La disponibilidad de alimento suficiente en su territorio (los lobos pueden recorrer en itinerancia hasta cien kilómetros diarios).
  • Las enfermedades que puedan diezmar su población
Cuando tiene lugar la aparición del hombre —también un superdepredador— la situación cambia, porque:
  • El hombre considera al lobo un peligro para sí mismo
  • El lobo y el hombre compiten en la caza de otros animales situados en una posición inferior dentro de la pirámide nutricional (jabalíes, corzos, cabras montesas, conejos).
  • En situaciones de carencia alimentaria el lobo amplía los límites de su territorio natural de caza en busca de alimento, llegando a atacar ocasionalmente a rebaños de ovejas o cabras.

El lobo es además un animal social, que vive fuertemente vinculado a un grupo —manada—, que es la base de la estructura social. Dentro de esta manada los comportamientos están fuertemente reglamentados en base a una jerarquía estricta.
El lobo tiene una camada (en raras ocasiones dos) anualmente, de entre tres a ocho cachorros. La loba amamanta a sus cachorros mientras que el macho le alimenta a ella cazando y regurgitando la comida que ha ingerido durante la caza. La lactancia dura alrededor de un mes.
Los lobeznos (cachorros de edad inferior a tres meses) son alimentados indistintamente por cualquier miembro de la manada.
Al cumplir los tres meses los lobeznos pasan a llamarse lobatos. Al cabo de un año tienen ya la morfología de adulto. Al cabo de un año y medio dejan de ser lobatos para pasar a ser lobos.
El lobo, al igual que el hombre, es un ser eminentemente social. Un alto porcentaje de su comportamiento está determinado por sus relaciones con otros miembros de su especie con los que forma manadas con el fin de obtener ventajas frente al medio de cara a la propia supervivencia.
Se puede decir que la unidad fundamental es la manada aunque, como hemos visto, se dan casos de individuos aislados en busca de otros individuos aislados con los que formar una nueva manada o, menos frecuentemente, de otra manada en al que integrarse.
El aprendizaje del comportamiento social del lobo comienza desde el momento de su nacimiento. Dentro de su propia camada se establecen pronto roles de comportamiento bien definidos en los que unos individuos prevalecen sobre otros por su carácter o su potencia física. Este inicio resulta crucial para el posterior desarrollo de los individuos porque determina inequívocamente el orden por el que se puede acceder al alimento.
Ya desde los juegos de los lobeznos se puede apreciar cómo unos dirigen, organizan o reprenden a aquellos de sus hermanos que tienen un estátus inferior al suyo. Los individuos más apocados o más débiles pueden quedar relegados del resto e incluso ser repudiados por la propia madre si su debilidad es manifiesta.

Ambos sexos cuentan con su propia jerarquía. Los individuos que ocupan la posición más alta dentro de ésta se denominan individuos "Alfa", los siguientes "Beta", y así sucesivamente. Los que ocupan la posición más baja se conocen como "Omega". Dentro de la dinámica de la jerarquía se presentan situaciones en las que un individuo reta a otro de posición superior por razones alimentarias o reproductivas (ya que la jerarquía gobierna también estos aspectos de la vida del lobo).
Según algunos estudios (Rodríguez de la Fuente) existe una fuerte tendencia a la monogamia en las parejas de lobos. De hecho, dentro de la doble jerarquía de los lobos (la masculina y la femenina), la pareja reproductora de la manada es la dominante, es decir, el macho alfa y la hembra alfa. Los demás adultos y subadultos de la manada no se reproducirán a no ser que pasen a ocupar el puesto de dominante o que abandonen la manada para formar otra independiente.
La principal actividad de la manada, la caza que le proporciona alimentos, se hace en grupo. Durante las cacerías el trabajo está perfectamente distribuido. El lobo es un animal en el que la resistencia prima sobre la potencia. Por esta razón la táctica de caza consiste en agotar a la presa, persiguiéndola hasta que su captura se hace posible.
El control y la disciplina en la manada es fundamental para que esta caza en equipo tenga éxito. Cuando despliegan un ataque sobre una presa, los lobos no aúllan ni ladran, pero sí gruñen y llegan a castañetear los dientes. Por el contrario, los perros suelen ser extremadamente ruidosos, lo cual ha servido a veces para poder determinar la identidad de los depredadores que han llegado a atacar rebaños domésticos (Grande del Brío, Castaño, Gallego).
En el momento en que una manada se hace demasiado numerosa para que el territorio que ocupa pueda sostenerla, se produce de forma natural una disgregación de la misma. Uno o más individuos se separan de ella para formar su propia manada, la cual deberá encontrar un territorio propio que le proporcione las oportunidades de caza necesarias para su subsistencia.
Se dan también casos en los que individuos solitarios, no integrados o expulsados de alguna manada, vagan por las montañas, e incluso por campos de cultivo, en busca de su sustento y de otros congéneres que estén dispuestos a crear una nueva manada.


domingo, 16 de enero de 2011

Artículo - España realiza con éxito trasplante multivisceral a niña de año y medio.

Estómago, duodeno, intestino, páncreas, hígado y bazo son los seis órganos trasplantados.

El Hospital La Paz de Madrid realizó "con éxito" un "complicado" trasplante de seis órganos del aparato digestivo a una niña de año y medio, que dos meses después de la intervención se recupera satisfactoriamente en su casa.

Así lo explicó hoy el director gerente de este hospital público, Rafael Pérez-Santamaría, quien recordó que en toda Europa sólo hay otros dos centros capaces de realizar este tipo de trasplantes, uno en Bimingham (Reino Unido) y el otro en París.

Estómago, duodeno, intestino, páncreas, hígado y bazo son los seis órganos trasplantados, procedentes de un donante que tenía menos de medio año cuando falleció.

La madre de Cristina, la niña intervenida, agradeció sin poder contener la emoción la "bondad" de los padres del donante y animó a todos a seguir este ejemplo, porque una vez que la persona ha fallecido "ya no hay solución y es angustioso ver como tu hijo se va deteriorando y el órgano que tiene que llegar no llega".

Esta es la cuarta vez que se lleva a cabo en España una operación de este tipo en niños. 


Los pacientes de las operaciones anteriores, realizadas todas en La Paz, fallecieron, y esta es la primera vez que se logra dar el alta al enfermo y considerar que la recuperación puede ser total.

Todo el proceso se prolongó 24 horas y el tiempo de cirugía duró aproximadamente 11 horas, explicó el cirujano responsable del trasplante intestinal, Manuel López Santamaría.

Este especialista, señaló, no obstante, que todos los niños trasplantados del mundo requieren siempre un seguimiento por las posibilidades de que pueda surgir un rechazo del órgano o los órganos o alguna infección.

Así, indicó que la niña "antes no tenía pronóstico y ahora tiene posibilidades de futuro", está libre de nutrición parenteral y tampoco tiene problemas hepáticos.

La madre de Cristina estaba embarazada de ocho meses cuando al feto se le detectó un bulto.

A los dos meses del nacimiento de la niña, el bulto había crecido seis centímetros y los médicos de otro hospital madrileño en el que fue ingresada resolvieron extirpárselo.

Durante la intervención se le lesionó la arteria mesentérica superior y luego siguieron diversas complicaciones, un progresivo deterioro de varios órganos, más intervenciones (hasta un total de cinco), para extirpar el duodeno y seccionar el intestino.

La paciente sufrió también lesiones en el páncreas y progresivamente, y como consecuencia de la nutrición parenteral, su función hepática se fue deteriorando, por lo que al final también se incluyó el trasplante de hígado.

Cuando se realizó la operación Cristina tenía 15 meses.

En relación a los otros tres trasplantes, que finalizaron con la muerte de los pacientes, López Santamaría señaló que desde el punto de vista quirúrgico la intervención fue un éxito, pero que el problema radicó en el mal estado previo de los intervenidos.

Era "una situación casi premortal" con la que llegaron a la mesa de operaciones, y ello, dijo, pasa factura en el postoperatorio.

En los últimos dos años, sólo se han llevado a cabo 69 operaciones multiorgánicas en todo el mundo y sólo 29 hospitales de todo el mundo han realizado trasplantes de intestino.

En la actualidad, en España, hay varios pacientes pediátricos en lista de espera para un trasplante de estas características.

El hospital La Paz es el primer hospital de España en trasplantes hepáticos infantiles, ya que realiza el 50 por ciento de todos los que se llevan a cabo en el país, con un índice de supervivencia que alcanza el 96 por ciento.

El equipo de trasplantes de este centro hospitalario público realizó su primer trasplante hepático infantil en 1986 y desde entonces ha efectuado un total de 406.

Enfermedades cardiovasculares.

Datos principales

  • Las ECV son la principal causa de muerte en todo el mundo. Cada año mueren más personas por ECV que por cualquier otra causa.
  • Se calcula que en 2005 murieron por esta causa 17,5 millones de personas, lo cual representa un 30% de todas las muertes registradas en el mundo; 7,6 millones de esas muertes se debieron a la cardiopatía coronaria, y 5,7 millones a los AVC.
  • Las muertes por ECV afectan por igual a ambos sexos, y más del 80% se producen en países de ingresos bajos y medios.
  • Se calcula que en 2015 morirán cerca de 20 millones de personas por ECV, sobre todo por cardiopatías y AVC, y se prevé que sigan siendo la principal causa de muerte.

¿Qué son las enfermedades cardiovasculares?

Las enfermedades cardiovasculares (ECV), es decir, del corazón y de los vasos sanguíneos, son:
  • La cardiopatía coronaria – enfermedad de los vasos sanguíneos que irrigan el músculo cardiaco (miocardio);
  • Las enfermedades cerebrovasculares – enfermedades de los vasos sanguíneos que irrigan el cerebro;
  • Las arteriopatías periféricas – enfermedades de los vasos sanguíneos que irrigan los miembros superiores e inferiores;
  • La cardiopatía reumática – lesiones del miocardio y de las válvulas cardíacas debidas a la fiebre reumática, una enfermedad causada por bacterias denominadas estreptococos;
  • Las cardiopatías congénitas – malformaciones del corazón presentes desde el nacimiento; y
  • Las trombosis venosas profundas y embolias pulmonares – coágulos de sangre (trombos) en las venas de las piernas, que pueden desprenderse (émbolos) y alojarse en los vasos del corazón y los pulmones.
Los ataques al corazón y los accidentes vasculares cerebrales (AVC) suelen ser fenómenos agudos que se deben sobre todo a obstrucciones que impiden que la sangre fluya hacia el corazón o el cerebro. La causa más frecuente es la formación de depósitos de grasa en las paredes de los vasos sanguíneos que irrigan el corazón o el cerebro. Los AVC también pueden deberse a hemorragias de los vasos cerebrales o coágulos de sangre.

Principales factores de riesgo

  • Las causas de las ECV están bien definidas y son bien conocidas. Las causas más importantes de cardiopatía y AVC son los llamados "factores de riesgo modificables": dieta malsana, inactividad física y consumo de tabaco.
  • Los efectos de la dieta malsana y de la inactividad física pueden manifestarse como "factores de riesgo intermedios": aumento de la tensión arterial y del azúcar y los lípidos de la sangre, sobrepeso y obesidad.
  • Los principales factores de riesgo modificables son responsables de aproximadamente un 80% de los casos de cardiopatía coronaria y enfermedad cerebrovascular.
  • También hay una serie de determinantes subyacentes de las enfermedades crónicas, es decir, "las causas de las causas", que son un reflejo de las principales fuerzas que rigen los cambios sociales, económicos y culturales: la globalización, la urbanización y el envejecimiento de la población. Otros determinantes de las ECV son la pobreza y el estrés.
Síntomas frecuentes
  • La enfermedad subyacente de los vasos sanguíneos no suele presentar síntomas, y su primera manifestación puede ser un ataque al corazón o un AVC.
  • Los síntomas del ataque al corazón consisten en dolor o molestias en el pecho, brazos, hombro izquierdo, mandíbula o espalda. Además puede haber dificultad para respirar, náuseas o vómitos, mareos o desmayos, sudores fríos y palidez.
  • La dificultad para respirar, las náuseas y vómitos y el dolor en la mandíbula o la espalda son más frecuentes en las mujeres.
  • El síntoma más frecuente de los AVC es la pérdida súbita, generalmente unilateral, de fuerza muscular en los brazos, piernas o cara. Otros síntomas consisten en la aparición súbita, generalmente unilateral, de entumecimiento en la cara, piernas o brazos; confusión, dificultad para hablar o comprender lo que se dice; problemas visuales en uno o ambos ojos; dificultad para caminar, mareos, pérdida de equilibrio o coordinación; dolor de cabeza intenso de causa desconocida, y debilidad o pérdida de conciencia.
  • Quienes sufran estos síntomas deben acudir inmediatamente al médico.

Cardiopatía reumática

La cardiopatía reumática está causada por la lesión de las válvulas cardiacas y el miocardio derivada de la inflamación y la deformación cicatrizal ocasionadas por la fiebre reumática, enfermedad que a su vez está causada por estreptococos y por lo común se manifiesta como una laringotraqueobronquitis o amigdalitis («anginas») en los niños. La fiebre reumática afecta principalmente a los niños en los países en desarrollo, especialmente ahí donde la pobreza está generalizada. En todo el mundo, casi 2% de las defunciones por enfermedades cardiovasculares están relacionadas con la cardiopatía reumática, mientras que 42% están vinculadas con la cardiopatía isquémica y 34% con las enfermedades cerebrovasculares.
Síntomas de la cardiopatía reumática
  • Los síntomas de la cardiopatía reumática consisten en dificultad para respirar, fatiga, latidos cardiacos irregulares, dolor torácico y desmayos.
  • Los síntomas de la fiebre reumática consisten en fiebre, dolor y tumefacción articulares, cólicos abdominales y vómitos.
Tratamiento de la cardiopatía reumática
  • El tratamiento rápido de la faringitis estreptocócica puede impedir la aparición de la fiebre reumática. El tratamiento prolongado y periódico con penicilina puede evitar los ataques repetidos de fiebre reumática causantes de la cardiopatía reumática y detener la progresión de la enfermedad en pacientes cuyas válvulas cardíacas ya han sido dañadas.

Costo económico de las enfermedades cardiovasculares

  • Las ECV afectan a muchas personas de mediana edad, y a menudo reducen gravemente los ingresos y los ahorros de los pacientes y de sus familias. Los ingresos que dejan de percibirse y los gastos en atención médica socavan el desarrollo socioeconómico de las comunidades y de los países.
  • Las ECV suponen una gran carga para las economías de los países. Por ejemplo, se calcula que en el próximo decenio (2006-2015) China perderá US$ 558 000 millones de renta nacional debido a las cardiopatías, los AVC y la diabetes.
  • La prevalencia de factores de riesgo y enfermedades, así como la mortalidad, suelen ser más elevadas en los grupos socioeconómicos más bajos de los países de altos ingresos. En los países de bajos y medianos ingresos se está observando una distribución similar a medida que avanza la epidemia.

¿Por qué motivo las enfermedades cardiovasculares son un problema en los países de ingresos bajos y medianos?

  • Más de 80% de las defunciones causadas por las ECV en el mundo se producen en los países de ingresos bajos y medianos.
  • Los habitantes de dichos países están más expuestos a los factores de riesgo que desembocan en las ECV y otras enfermedades no transmisibles y carecen de acceso a los métodos preventivos que se aplican en los países de ingresos altos.
  • Los habitantes de los países de ingresos bajos y medianos aquejados de ECV y otras enfermedades no transmisibles tienen un menor acceso a servicios de asistencia sanitaria eficientes y equitativos que respondan a sus necesidades (en particular, los servicios de detección temprana).
  • Como consecuencia, muchos habitantes de dichos países mueren más jóvenes, de ordinario en la edad más productiva, a causa de las ECV y otras enfermedades no transmisibles.
  • Quienes llevan la peor parte son los pobres de los países de ingresos bajos y medianos. Se ha comprobado que las ECV y otras enfermedades no transmisibles contribuyen a la aparición o persistencia de la pobreza. Por ejemplo, una familia con un miembro aquejado de una ECV puede verse obligada a destinar el 30% o más del ingreso familiar para sufragar los gastos de atención médica de carácter catastrófico que esta ocasiona.
  • En el nivel macroeconómico, las ECV imponen una carga onerosa a los países de ingresos bajos y medianos. Se calcula que las cardiopatías, los accidentes vasculares cerebrales y la diabetes sacarina reducen entre 1% y 5% el producto interno bruto en los países de ingresos bajos y medianos que pasan por un crecimiento económico rápido, pues muchas personas mueren prematuramente. Por ejemplo, se calcula que, a causa de la combinación de cardiopatías, accidentes cerebrovasculares y diabetes sacarina, en la década 2006-2015 China perderá $558 000 millones en concepto de ingresos nacionales devengados.

¿Cómo reducir la carga de las enfermedades cardiovasculares?

  • Al menos un 80% de las muertes prematuras por cardiopatía y AVC podrían evitarse con una dieta saludable, actividad física regular y abandono del consumo de tabaco.
  • Es posible reducir el riesgo de ECV realizando actividades físicas de forma regular; evitando la inhalación activa o pasiva de humo de tabaco; consumiendo una dieta rica en frutas y verduras; evitando los alimentos con muchas grasas, azúcares y sal, y manteniendo un peso corporal saludable.
  • La forma de prevenir y controlar las ECV es a través de una acción global e integrada:
    • Una acción global requiere la combinación de medidas que traten de reducir los riesgos en la totalidad de la población y de estrategias dirigidas hacia los individuos con alto riesgo o que ya padecen la enfermedad.
    • Como ejemplos de intervenciones poblacionales que permiten reducir las ECV se pueden citar las políticas globales de control del tabaco, los impuestos para reducir la ingesta de alimentos ricos en grasas, azúcares y sal, la creación de vías para peatones y bicicletas con el fin de fomentar la actividad física, y el suministro de comidas saludables en los comedores escolares.
    • Las estrategias integradas se centran en los principales factores de riesgo comunes a varias enfermedades crónicas tales como las ECV, la diabetes y el cáncer: dieta malsana, inactividad física y consumo de tabaco.
  • Existen medicamentos eficaces y baratos para tratar la práctica totalidad de las ECV.

Estrategia de la OMS para la prevención y control de las enfermedades crónicas

La labor de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en materia de ECV está integrada en el marco general de la prevención y control de las enfermedades crónicas que ha elaborado el Departamento de Enfermedades Crónica y Promoción de la Salud. Los objetivos estratégicos del departamento consisten en aumentar la concienciación acerca de la epidemia de enfermedades crónicas; crear entornos saludables, especialmente para las poblaciones pobres y desfavorecidas; frenar e invertir la tendencia al aumento de los factores de riesgo comunes de las enfermedades crónicas, tales como la dieta malsana y la inactividad física, y prevenir las muertes prematuras y las discapacidades evitables causadas por las principales enfermedades crónicas.




¡Animales en peligro! - Koala

El koala, nombre común de un marsupial arborícola donde su aspecto se asemeja al de un oso de peluche, con hábitos muy tranquilos similares a los de un perezoso, un animal realmente hermoso y amigable.


Descripción:
El Koala llega a tener una longitud corporal de 76 cm., el cuerpo es rechoncho, esta cubierto de un pelaje espeso, suave y de color gris. Su cabeza es grande y redonda, y tiene las orejas peludas y redondeadas.
Las extremidades posteriores son cortas, con pies grandes y tiene cinco dedos, cada mano también tiene cinco dedos, donde dos de ellos son opuestos a los otros tres, cada dedo posee una garra fuerte y grande.
Las patas de atrás no tienen garras en el dedo mayor, y el segundo y tercer dedo están fusionados para formar un garfio con el que pueden sacarse las garrapatas, de las que sufren muy seguido

Estas características hacen que el koala sea perfecto para su vida arborícola y es fácil de observar en los bosques de eucaliptos del este de Australia que constituyen su único hábitat, así como su fuente de alimento, porque este animal solo come las hojas y las yemas de estos árboles.
Los koalas que viven en climas con menos calor son por lo general más grandes y tienen el pelaje más oscuro y espeso que aquellos que viven en climas más cálidos

El peso promedio de estos animales son de 12 Kg. en los machos y 8 Kg. en las hembras. Los koalas de la seca Queensland son casi siempre más pequeños, con un peso promedio de los machos de 8 Kg. y de las hembras de 6 Kg.
En la fértil Victoria (Australia), un macho adulto puede llegar a pesar hasta 14 Kg., y una hembra hasta 11 Kg.

Una distinción entre un macho y una hembra es la bolsa testicular del macho, también por la glándula que tienen en el pecho que largan olor. Las hembras, se identifican por la bolsa o marsupio. Además, normalmente son más bonitas, lo que se debe a sus facciones y a su estatura que es más chica. Los machos adultos pueden ser hasta el doble de grandes que las hembras adultas y, además de tener la curvatura de la nariz más pronunciada, la forma de su cabeza es diferente a la de las hembras.
 






Sentidos:
Son animales nocturnos es por esto que poseen buenas facultades auditivas. Su visión es muy escasa. La nariz de los koalas es extremadamente sensible. Esta les da información a todo lo que concierne supervivencia, territorio y también el apareamiento.

Habitad:
Las poblaciones de koalas sólo pueden extenderse si se encuentran en el hábitat adecuado. Esto incluye sus árboles favoritos como los eucaliptos que deben crecer sobre un suelo adecuado, además de suficientes precipitaciones. También deberá haber otros koalas viviendo en las proximidades.



Modo de vivir:
Los koalas viven arriba de los árboles y realizan la mayor parte de sus actividades de noche. Duermen 20 horas al día para no gastar energías. Sus depredadores naturales son los dingos, las lechuzas, las águilas, los varanos, los buitres y las serpientes pitón. También Las épocas de sequía y los incendios resultan peligrosos

Alimentación:
Los koalas solo se alimentan de las hojas y corteza y también de los frutos. Un koala adulto necesita entre 200 y 400 gramos de hojas al día.

La disminucion de la especie:
Una importante disminución de los koalas se debe a la tala indiscriminada y también a los accidentes de tránsitos. Según un informe el 75% de los accidentes con autos que involucran animales son koalas.
 

viernes, 7 de enero de 2011

¡Animales en peligro! - Aguila imperial ibérica.

El águila imperial ibérica (Aquila adalberti) es una especie de ave falconiforme de la familia Accipitridae. Es la única ave endémica de la Península Ibérica. Hasta no hace mucho se le consideraba una subespecie del águila imperial (Aquila heliaca), pero los estudios de ADN de ambas aves demostraron que estaban lo suficientemente separadas como para constituir cada una, una especie válida. El águila imperial ibérica es un ave muy amenazada, y en la actualidad se estima una población de entre 350 y 400 individuos.

Hábitat:
Sus territorios abarcan una gran cantidad de hábitats, desde pinares en las zonas de montaña a sistemas dunares y marismas en zonas de costa. Sus mayores densidades se alcanzan en terrenos llanos o con relieves suaves, con formaciones arbóreas de importancia, aunque no dominantes (dehesas) y con buenas poblaciones de conejo.
Históricamente la persecución de esta especie hizo que las parejas supervivientes fueran las que se refugiaron en zonas de difícil acceso y relieve abrupto, generalmente en zonas de montaña. Su recuperación ha llevado a que las nuevas parejas, y también algunas antiguas vayan ocupando espacios de llanura y penillanura.
Dentro del territorio del águila, de su zona de campeo, se pueden distinguir tres zonas: la zona de nidificación; la zona de alimentación cercana, el cazadero más habitual que es defendido por la pareja para su uso exclusivo; y la zona de alimentación lejana que se usa de manera más ocasional, su uso es compartido con otras parejas y otras rapaces, y se usa más fuera de la época de cría.
Los jóvenes, al emanciparse, se dispersan por zonas cercanas o alejadas de donde nacieron, en busca de nuevos territorios de caza y reproducción.



 Alimentación y reproducción:

Alimentación

El grueso de su alimentación lo constituyen los conejos, que cazan en solitario o en pareja. También depreda sobre liebres, palomas, cuervos y otras aves, y en menor medida zorros y pequeños roedores, y pueden alimentarse ocasionalmente de carroña.

Reproducción

El águila imperial ibérica es monógama. La época de celo se da de marzo a julio, durante el cual las águilas reacondicionan uno de los nidos que han usado durante años rotando de uno a otro. Estos nidos están situados en la copa de árboles como alcornoques o pinos. En las zonas de repoblación forestal se han habituado a nidificar sobre eucaliptos, a pesar de ser ésta una especie alóctona. Nidifican tanto en ramas altas como bajas.
La puesta típica consta de 4 a 5 huevos de 130 gramos de peso que se incuban durante 43 días. Es común el que se desarrollen hasta tres polluelos, aunque esta tendencia ha disminuido en los últimos años debido al uso de pesticidas, que aumentan el número de huevos infértiles. Si el año es malo y hay poca comida, el pollo mayor la acapara y es el único que sobrevive; no obstante, se puede decir que el águila imperial ibérica no practica el cainismo. Cuando necesitan ir en busca de comida, los padres cubren los huevos o polluelos con hojas y ramas para evitar que sean descubiertos por los depredadores, algo que a veces no es suficiente, terminando con alguno de los pollos capturado por un águila real o, en el caso de los nidos bajos, incluso un zorro u otro carnívoro de tamaño medio.
Los jóvenes abandonan el nido entre 65 y 78 días después de nacer, pero continúan viviendo en las inmediaciones y siendo alimentados por los padres durante 4 meses. Pasado este tiempo, se independizan y emprenden una vida nómada. Cuando alcanzan la madurez sexual suelen visitar los límites de los territorios de parejas sedentarias a la búsqueda de algún individuo de sexo contrario "soltero" o "viudo". Los jóvenes nómadas son frecuentemente atacados por las parejas de adultos en cuyos territorios se han adentrado.



 

miércoles, 5 de enero de 2011

Tratamientos del cáncer.

El tratamiento del cáncer se fundamenta en tres pilares: cirugía, quimioterapia y radioterapia.
Cirugía
La cirugía consiste en eliminar el tumor mediante intervenciónes quirúrgicas.
Es el tratamiento principal para muchos cánceres, como el de útero o el de pulmón.


Quimioterapia
La quimioterapia es, de forma general, cualquier tratamiento médico basado en la administración de sustancias químicas (fármacos). En medicina se llama tratamiento quimioterápico al que se administra para curar la tuberculosis, algunas enfermedades autoinmunes y el cáncer.


Radioterapia
La radioterapia es una forma de tratamiento basado en el empleo de radiaciones ionizantes (rayos X o radiactividad, la que incluye los rayos gamma y las partículas alfa).




 

Cáncer

El cáncer es un conjunto de enfermedades en las cuales el organismo produce un exceso de células malignas (conocidas como cancerígenas o cancerosas), con crecimiento y división más allá de los límites normales, (invasión del tejido circundante y, a veces, metástasis). La metástasis es la propagación a distancia, por vía fundamentalmente linfática o sanguinea, de las células originarias del cáncer, y el crecimiento de nuevos tumores en los lugares de destino de dicha metástasis. Estas propiedades diferencian a los tumores malignos de los benignos, que son limitados y no invaden ni producen metástasis. Las células normales al sentir el contacto con las células vecinas inhiben la reproducción, pero las células malignas no tienen este freno. La mayoría de los cánceres forman tumores pero algunos no (como la leucemia).
El cáncer puede afectar a todas las edades, incluso a fetos, pero el riesgo de sufrir los más comunes se incrementa con la edad. El cáncer causa cerca del 13% de todas las muertes. De acuerdo con la Sociedad Americana del Cáncer, 7,6 millones de personas murieron de cáncer en el mundo durante 2007.
El cáncer es causado por anormalidades en el material genético de las células. Estas anormalidades pueden ser provocadas por agentes carcinógenos, como la radiación (ionizante, ultravioleta, etc), de productos químicos (procedentes de la industria, del humo del tabaco y de la contaminación en general, etc) o de agentes infecciosos. Otras anormalidades genéticas cancerígenas son adquiridas durante la replicación normal del ADN, al no corregirse los errores que se producen durante la misma, o bien son heredadas y, por consiguiente, se presentan en todas las células desde el nacimiento (causando una mayor probabilidad de desencadenar la enfermedad). Existen complejas interacciones entre el material genético y los carcinógenos, un motivo por el que algunos individuos desarrollan cáncer después de la exposición a carcinógenos y otros no. Nuevos aspectos de la genética del cáncer, como la metilación del ADN y los microARNs, están siendo estudiados como importantes factores a tener en cuenta por su implicación.
Las anormalidades genéticas encontradas en las células cancerosas pueden ser de tipo mutación puntual, translocación, amplificación, deleción, y ganancia/pérdida de todo un cromosoma. Existen genes que son más susceptibles a sufrir mutaciones que desencadenen cáncer. Esos genes, cuando están en su estado normal, se llaman protooncogenes, y cuando están mutados se llaman oncogenes. Lo que esos genes codifican suelen ser receptores de factores de crecimiento, de manera que la mutación genética hace que los receptores producidos estén permanentemente activados, o bien codifican los factores de crecimiento en sí, y la mutación puede hacer que se produzcan factores de crecimiento en exceso y sin control.
El cáncer es generalmente clasificado según el tejido a partir del cual las células cancerosas se originan. Un diagnóstico definitivo requiere un examen histológico, aunque las primeras indicaciones de cáncer pueden ser dadas a partir de síntomas o radiografías. Muchos cánceres pueden ser tratados y algunos curados, dependiendo del tipo, la localización y la etapa o estado en el que se encuentre. Una vez detectado, se trata con la combinación apropiada de cirugía, quimioterapia y radioterapia. Según investigaciones, los tratamientos se especifican según el tipo de cáncer y, recientemente, también del propio paciente. Ha habido además un significativo progreso en el desarrollo de medicamentos que actúan específicamente en anormalidades moleculares de ciertos tumores y minimizan el daño a las células normales. El diagnóstico de cáncer en pacientes está, en gran medida, influenciado por el tipo de cáncer, así como por la etapa o la extensión de la enfermedad (frecuentemente en estados iniciales suele ser confundido con otras patologías si no se realizan los diagnósticos diferenciales adecuados). La clasificación histológica y la presencia de marcadores moleculares específicos pueden ser también útiles en el diagnóstico, así como para determinar tratamientos individuales.

Tratamiento del cáncer

El tratamiento del cáncer se fundamenta en tres pilares: cirugía, quimioterapia y radioterapia. Existe un cuarto pilar llamado terapia biológica que incluiría la hormonoterapia, inmunoterapia, y nuevas dianas terapéuticas no citotóxicas. El tratamiento del cáncer es multidisciplinar donde la cooperación entre los distintos profesionales que intervienen (cirujanos, oncólogos médicos y oncólogos radioterápicos), es de máxima importancia para la planificación del mismo; sin olvidar el consentimiento informado del paciente. En todo momento, el apoyo emocional es fundamental y la búsqueda de los posibles detonantes psicoemocionales o psicobiológicos.
A veces, dada la incapacidad actual de la ciencia para curar los tipos de cáncer más agresivos en estados avanzados de evolución, es preferible renunciar al tratamiento curativo y aplicar un tratamiento paliativo que proporcione el menor grado posible de malestar y conduzca a una muerte digna. En estos casos el apoyo emocional cobra una importancia primordial.
En el plan de tratamiento hay que definir si la intención es curativa o paliativa.
La respuesta al tratamiento puede ser:
  • Completa: Si se ha producido la desaparición de todos los signos y síntomas de la enfermedad.
  • Parcial: Si existe una disminución mayor del 50% en la suma de los productos de los diámetros perpendiculares de todas las lesiones mensurables.
  • Objetiva: Es la respuesta completa o parcial.
  • Progresión: Si aparece cualquier lesión nueva o existe un aumento mayor del 25% en la suma de los productos de los diámetros perpendiculares de todas las lesiones mensurables.
  • Estable: Si existe crecimiento o reducción del tumor que no cumple ninguno de los criterios anteriores.
Cuando no es posible la medida de las lesiones, los marcadores tumorales son útiles para valorar la respuesta al tratamiento.